La otra crisis de la pandemia en Honduras

A medida que el planeta se aísla y se distancia socialmente, en Honduras se ha ordenado estrictamente a la población que se quede en casa ya que solo tiene 65 ventiladores en el país y no está preparada para lo que vendrá después.

El problema es que ahora las familias más pobres, que viven en la subsistencia diaria, son personas hambrientas y la desesperación está aumentando.

Parte de la solución hacia la cual trabaja PAHS es ayudar a recolectar granos básicos para armar paquetes de alimentos y entregarlos a las familias más necesitadas.

¡Oraciones, donaciones, ideas y conexiones de redes son bienvenidas mientras enfrentamos esta crisis juntos!